2º Ordinario
Semana del 14 al 20 de enero de 2024
Domingo de la 2ª semana de Tiempo Ordinario
14 de enero de 2024, San Félix
SALUDOS CORDIALES
Paz y bien,
Volviendo al Tiempo Ordinario hhoy la Iglesia nos invita a celebrar la Infancia Misionera. La misión no es solo dar cosas, es entregar lo que yo vivo y soy, es sentirnos unidos a todos los misioneros que enseñan el evangelio, la vida de la fe. Misión es sentirme responsable desde la oración y la vida, que Jesús sea conocido y amado.
Feliz domingo y que Dios os bendiga.
LITURGIA DE LA PALABRA
- PRIMERA LECTURA – Habla, Señor, que tu siervo escucha.
Lectura del primer libro de Samuel 3, 3b-10. 19.
En aquellos días, Samuel estaba acostado en el templo del Señor, donde estaba el Arca de Dios. Entonces el Señor llamó a Samuel.
Este respondió: «Aquí estoy.»
Corrió adonde estaba Elí y le dijo: «Aquí estoy, porque me has llamado».
Respondió: «No te he llamado; vuelve a acostarte». Fue y se acostó.
El Señor volvió a llamar a Samuel. Se levantó Samuel, fue adonde estaba Elí y dijo: «Aquí estoy, porque me has llamado».
Respondió: «No te he llamado, hijo mío. Vuelve a acostarte».
Samuel no conocía aún al Señor, ni se le había manifestado todavía la palabra del Señor. El Señor llamó a Samuel, por tercera vez. Se levantó, fue adonde estaba Elí y dijo: «Aquí estoy, porque me has llamado». Comprendió entonces Elí que era el Señor el que llamaba al joven.
Y dijo a Samuel: «Ve a acostarte. Y si te llama de nuevo, di: “Habla, Señor, que tu siervo escucha”». Samuel fue a acostarse en su sitio.
El Señor se presentó y llamó como las veces anteriores: «¡Samuel, Samuel!».
Respondió Samuel: «Habla, que tu siervo escucha».
Samuel creció. El Señor estaba con él, y no dejó que se frustrara ninguna de sus palabras.
Palabra de Dios.
- SALMO RESPONSORIAL – Sal 39, 2 y 4ab. 7. 8-9. 10.
- Aquí estoy, Señor, para hacer tu voluntad.
Yo esperaba con ansia al Señor; él se inclinó y escuchó mi grito;
me puso en la boca un cántico nuevo, un himno a nuestro Dios. R.
Tú no quieres sacrificios ni ofrendas, y, en cambio, me abriste el oído;
no pides holocaustos ni sacrificios expiatorios; entonces yo digo: «Aquí estoy». R.
«-Como está escrito en mi libro – para hacer tu voluntad.
Dios mío, lo quiero, y llevo tu ley en las entrañas». R.
He proclamado tu salvación ante la gran asamblea;
no he cerrado los labios; Señor, tú lo sabes. R.
SEGUNDA LECTURA – ¡Vuestros cuerpos son miembros de Cristo!.
Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Corintios 6, l3c-15a. 17-20
Hermanos:
El cuerpo no es para la fornicación, sino para el Señor; y el Señor, para el cuerpo. Y Dios resucitó al Señor y nos resucitará también a nosotros con su poder.
¿No sabéis que vuestros cuerpos son miembros de Cristo? El que se une al Señor es un espíritu con él. Huid de la fornicación. Cualquier pecado que cometa el hombre queda fuera de su cuerpo. Pero el que fornica peca contra su propio cuerpo. ¿Acaso no sabéis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, que habita en vosotros porque lo habéis recibido de Dios? Y no os pertenecéis, pues habéis sido comprados a buen precio.
Por tanto, ¡glorificad a Dios con vuestro cuerpo! Palabra de Dios.
- EVANGELIO – Vieron dónde vivía y se quedaron con él.
Lectura del santo Evangelio según san Juan 1, 35-42
En aquel tiempo, estaba Juan con dos de sus discípulos y, fijándose en Jesús que pasaba, dice: «Este es el Cordero de Dios».
Los dos discípulos oyeron sus palabras y siguieron a Jesús. Jesús se volvió y, al ver que lo seguían, les pregunta: «¿Qué buscáis?»
Ellos le contestaron: «Rabí (que significa Maestro), ¿dónde vives?»
Él les dijo: «Venid y veréis».
Entonces fueron, vieron dónde vivía y se quedaron con él aquel día; era como la hora décima. Andrés, hermano de Simón Pedro, era uno de los dos que oyeron a Juan y siguieron a Jesús; encuentra primero a su hermano Simón y le dice: «Hemos encontrado al Mesías (que significa Cristo)».
Y lo llevó a Jesús. Jesús se le quedó mirando y le dijo: «Tú eres Simón, el hijo de Juan; tú te llamarás Cefas (que se traduce Pedro)». Palabra del Señor.
COMENTARIO PASTORAL
“Comparto lo que soy”
Este es el lema de la Jornada de Infancia Misionera que celebramos el domingo 14 de enero de 2024. Hoy los niños están invitados a ayudar a los demás niños, especialmente a los que no tienen lo necesario para vivir o no conocen a Dios. Somos misioneros, y nosotros vamos a ayudarles con nuestra oración y nuestro dinero.
Con esta Obra Pontificia, el Santo Padre implica a los niños del mundo para ayudar a otros pequeños como ellos en las misiones. Y cuenta también con adultos comprometidos, para que los misioneros sigan proporcionando educación, salud y formación cristiana a más de 4 millones de niños en 120 países.
La Infancia Misionera es el reflejo de la universalidad de la iglesia en los más pequeños. Niños de todo el mundo se forman en la misión y comparten sus aportaciones para ayudar a los misioneros en su trabajo con los niños. Gracias a su generosidad, los misioneros cuentan con una ayuda para que más de cuatro millones de niños en las misiones puedan acceder a la educación, la salud, la protección de la vida, y la fe.
Pastoralsantiago.org
AVISOS PARROQUIALES
% Exposición del Santísimo: los jueves a las 19.00 h. tenemos un ratito de oración acompañando a Jesús y dejándonos acompañar por él en la exposición del Santísimo.
% Lectio Divina: los viernes a las 20.00 h. te invitamos a participar en la Lectio Divina, taller de oración que nos acerca a las lecturas del domingo.